domingo, 23 de septiembre de 2012

La persona que es justa

23/09/12 
Predicadora: Iris Juárez

Creemos que estamos en un tiempo de recambio, de preparación para la Iglesia para comenzar a marchar. Vienen tiempos nuevos y estos tiempos son para ti. En este tiempo el Espíritu Santo nos está llevando a esa dimensión. Estamos entrando en un tiempo profético, en el que todos podremos profetizar. Le pregunté al Señor qué quieres que enseñe a Tu pueblo. Y el Señor me dijo que viéramos la justicia. Uno de los atributos de Dios es la justicia. Y este concepto lo vemos en toda la Biblia. En el Antiguo Testamento, justicia significa ser recto. En el Nuevo Testamento, justicia significa lo mismo. Por lo tanto la Palabra dice que Dios es recto porque no se equivoca, porque Su acción es justicia y se opone al pecado. 
Job 1:1-12
Job era un varón perfecto, recto y temeroso de Dios. Job, siendo humano, nos demuestra que nosotros también podemos ser perfectos, rectos y temerosos de Dios. Job pasó todo lo que vivió a causa del pecado de sus hijos. Sus hijos no eran temerosos de Dios, ni perfectos, ni hacían justicia. Y a causa de sus hijos, este hombre fue probado y tocado por el enemigo. Cuando Job fue probado, nunca blasfemó contra Dios. Job fue justo antes y durante la tribulación. Acá vemos un tipo de justicia. 
Filipenses 3:10-13
Job perdió todo, olvidando todo para esforzarse en alcanzar Lo que está adelante. Cuando Job terminó de pasar la prueba, afirmó que de oídos había oído hablar de Dios, pero ahora sus propios ojos Lo ven. Y sucedió porque Dios se reveló. Pablo vive por el Espíritu, pero dice que de todos los carnales, él es más carnal en cuento a emociones, mente, voluntad y pensamientos. Si a Pablo le hablan de circuncisión. Él fue circuncidado al octavo día de haber nacido. Si a Pablo le hablan de linaje, él era del linaje de Israel, de Jacob, de la tribu de Benjamín. Era hebreo y fariseo de fariseos. En cuanto a la carne, Pablo era más que todos. Pero en cuanto al Señor, él era un hombre intachable y sabía las Escrituras de memoria porque su título lo decía: fariseo de fariseos. Pablo era un hombre muy instruido en las ordenanzas que debía cumplir. “Pero”. Pero significa que lo que viene es diferente a lo que se afirmo al principio. Pero cuántas cosas para él era ganancia, las estimó como pérdida por amor a Cristo, para ser encontrado en Jesús y no atado a cosas terrenales. Pablo aprendió a conocer a Dios, y observó que todos sus años fueron basura, a fin de conocer la excelencia de Dios y conocer a Dios. Te pregunto a ti: ¿Habrá alguna cosa importante más que Dios? ¿Tus estudios son más importantes que Dios? ¿Tu trabajo es más importante que Dios? ¿Tu casa es más importante que Dios? ¿Tu automóvil es más importante que Dios? ¿Las personas que más quieres son más importantes que Dios? ¿La economía que hoy tienen tus manos es más importante que Dios? Pablo dijo que todo el bagaje del conocimiento adquirido por los años lo consideró como basura para desecharlo, con el fin de ganar almas para Cristo. Y nosotros a veces valoramos más la basura que al Señor Jesús. Tengamos temor de las cosas que el Señor pone en nuestras manos. Si Dios te pone en un lugar, cuídalo como el más preciado.
Filipenses 3:17-21
La expresión “enemigo de la cruz de Cristo” significa no reconocer a Cristo; no querer la cruz, que solo piensa en lo terrenal. En la historia del hijo pródigo, el padre es el justo. El hijo menor fue desobediente, pero reconoció su falta, se humilló y se arrepintió. El hijo mayor se enojó. Tomó una posición de orgullo, altivez, desobediencia y sordera. El que se arrepiente, es el que decide cambiar para ser transformado. El hijo mayor no quería oír lo que el padre le quería decir. Para Dios el tiempo no cuenta, porque Él es eterno. Para Dios, este hijo mayor era un infante con falta de temor a Dios. La falta de temor a Dios es no conocer lo que Dios dice por medio de Su palabra. Y por ello el hijo mayor alzó su voz y cuestionó la autoridad del padre. En cambio el hijo menor tuvo una actitud madura. Si quieres vivir en este tiempo de cambio, tendrás que bajar la cabeza y reconocer que Dios está obrando. Dios no juega, más si nosotros hemos conocido Su palabra. Cuando perdemos el temor de Dios, actuamos como si Dios no valiese nada, y andamos. Total, no pasa nada. Pero Dios es justicia, y Su justicia es aplicable sobre este tipo de persona que no puede humillarse, como el hijo mayor. El hijo menor sabía que si regresaba a la casa de su padre, Dios cambiaría su lamento en baile. Y a causa del arrepentimiento, comienza la unión del espíritu con el Espíritu Santo. Esto es estar en Dios, unir Cielo y tierra. Y como consecuencia de la falta de arrepentimiento, el hijo mayor quedó fuera de la casa del padre. Acá vemos dos tipos de personas, una carnal y otra espiritual. El hijo mayor por creer que por permanecer en la Iglesia, era el más espiritual de todos. Lo que te habilita a ser una persona espiritual es tu entrega, humillación y temor a Dios. Y eso sucede porque el hijo menor conocía a Dios. Por lo tanto estaba dentro del Señor. Una acción produjo fe, porque el hijo menor sabía lo que era estar en el Padre. Y a causa del regreso a la vida espiritual, el padre le puso vestiduras nuevas. Vemos el caso de Job, que conocía a Dios, temía a Dios porque sabía como piensa, quiere y demanda el Señor. Dios comienza a obrar cuando tú tienes esa determinación y se produce la muerte espiritual al entregar al Señor tus planes, pensamientos y deseos. Y comienzas una dependencia con el Espíritu Santo para caminar con el Señor Jesús. En tu dependencia, pregúntale al Señor: ¿Qué quieres que haga? ¿Qué canción quieres que cante? ¿Tú quieres que vaya a ese lugar? ¿Tú quieres eso para mí? ¿Qué quieres que siga estudiando? Es decir no decidir nada sin antes consultar al Señor. Y a decir verdad, lo que nos cuesta a nosotros como personas es esperar. Y todo se ve por los resultados cuando tú decides no depender del Señor. Una cosa es vivir con el Evangelio sin el Espíritu Santo. La revelación viene de arriba hacia abajo. Si el esposo no es el que gobierna la casa, la cobertura, es decir la protección de Dios no estará sobre esa familia. Si el varón de la familia ora y pregunta ¿Señor qué voy hacer? De esta manera, nunca esta familia será tocada por el enemigo porque hay un alineamiento. 
Job 42:2-4 
Job aprendió este principio de alinearse con Dios: “Te preguntaré y Tú me responderás”. 
Job 42:5-9 
A partir de ese momento, Job comenzó a tener una relación diferente con Dios porque comenzó a tener revelación por medio del sueño, visiones y Su palabra.
Dios hará lo mismo contigo para que te goces y sacar lo que se encuentra en tus entrañas y emociones que no son de Dios.
La justicia va acompañada de fe. Pero para que ello suceda, tendrás que cambiar formas viejas; todas serán hechas nuevas, pero no con las características del hijo mayor. Nosotros tenemos que ser libres de las estructuras viejas para entrar a la casa del Señor.

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