viernes, 10 de julio de 2009

El espejo de la Palabra de Dios, nos devuelve una imagen de nuestro crecimiento espiritual

10/07/09
Predicador: Luís Domínguez

Dios cuando da una palabra, la cumple a toda costa. Tienes que ser crédulo y pedir a Dios que te ayude con tu incredulidad. Toma la Palabra de Dios para que se cumpla.
1 Corintios 13:11-13
Como nosotros no sabemos y no entendemos las cosas espirituales, necesitamos que la Palabra de Dios sea revelada permanentemente.
Antiguamente en los espejos se podía ver una imagen en nebulosa, y de igual manera no se podía tener en claro lo que iba a venir.
Dios quiere que estemos más atentos a Sus propósitos y estemos sedientos de Su palabra para enriquecernos y descubrir Sus cosas.
Dios ama a los que investigan y tienen sed de Su palabra. Hacerse preguntas es bueno porque Dios quiere que tengas sed de más. Creer sin saber nada no es bueno, y Dios quiere que creas por tus propios medios y no creas por fe prestada. Creer en Dios es una renovación constante de nuestros propios principios para cuidar nuestra fe.
Santiago 1:23-25
En este pasaje vemos un espejo que nos devuelve una imagen. Quiere decir que constantemente estamos observando como estoy, como si no nos conociéramos la cara. Pero aquí el espejo es la Palabra de Dios, porque es fiel de lo que tengo que ser. La Palabra de Dios es la que me va a delinear. Dios quiere que entendamos quiénes somos por medio de Su palabra. Si está desalineada nuestra imagen, se corregirá para mejor.
Muchas veces hemos trabajado para que otros nos vean bien, pero Dios trabaja en nuestro interior para Él, y no para los demás.
En mi intimidad yo tengo que saber qué cambiar y producir el cambio que demanda la Palabra de Dios. Su palabra nos orienta como profundizar el cambio.
En un niño, es la madre quien lo peina y sugiera la vestimenta para lograr su aprobación. Pero cuando crecemos espiritualmente, es uno quien tiene un compromiso ante Cristo.
Ve a la Palabra de Dios para saber como tienes que salir a la calle.
A veces creemos que sabemos cosas, hasta que nos viene el conflicto para recién buscar información y saber el paso a seguir. La vida cristiana es para vivirla, no para sufrirla.
2 Corintios 3:18
En este pasaje vemos un tercer espejo que supera a lo que está escrito, porque ya estamos en la Gloria de Dios. Cuando vives en la Gloria de Dios, empiezas a buscar los tesoros espirituales de allá arriba; y aquí empieza una transformación mayor. Pero cuando bajamos la vista y empezamos a buscar lo terrenal, quiere decir que estoy en una esfera menor.
Dios te puede dar todo, pero la pregunta es: ¿Vos podes darlo todo por Dios? Aquí tienes que apuntar tu vida espiritual, lograr dar el cien por ciento a Dios. Si Dios no está en todo, entonces hay algo que no captaste. Hoy hay mucha ansiedad en la gente y eso es lo que Dios tiene que estar sanando y restaurando.
Hay que trabajar para la Gloria de Dios, hay que pelear por más, por la presencia de Dios, porque hay mucho por recibir.
Jesús terminaba de ministrar, y cansado se iba al monte a orar, a estar cara a cara con Su Padre. Ese es el ejemplo a seguir.
La búsqueda de la Gloria de Dios es atreverse a más. La exigencia del Señor es que lo tengas cara a cara. Es un desafío que hay que buscar, que estemos en la presencia de Dios, que estemos ante el espejo de gloria para cambiar y ser transformados. La Santidad de Dios se logra cuando tienes comunión con Él.
Si vamos a la presencia de Dios, recibiremos revelación para saber si es verdad o no lo que nos dicen las noticias. No nos podrán mentir al andar en la Gloria de Dios.

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