domingo, 18 de mayo de 2008

El río de Jesucristo

18/05/08
Predicador: Edinson Pinedo

Salmo 42:5-11
Este pasaje de la Biblia muestra a un salmista angustiado.
Este Salmo está basado en los hijos de Coré que se rebelaron contra su siervo Moisés.
Cuando Dios levanta a un Pastor, un Misionero es una autoridad. Una de las cosas que no tolera Dios es la rebelión porque es blasfemar (renegar) al Espíritu Santo.
Cuando tú estás ocupado en las cosas de Dios no morirás en la tragedia. Dios guarda a Sus hijos en los momentos difíciles y si te ha dicho que te bendecirá, pues créelo; y si andas temeroso es porque no le creíste.
El salmista no dice que es David el que escribe, y hace una comparación de la aflicción que siente con un siervo cuando clama por agua, así clama mi alma dice el salmista.
1 Corintios 11:27-32
La palabra de Dios dice: examínate a ti mismo cómo estás delante de Dios para que no comas juicio, porque si lo haces estarás volviendo a crucificar la vida de Cristo, y Dios te va hacer responsable de la crucifixión de Jesús.
El grupo de Coré era la sinfónica de Israel, y se componía de toda una vida o generación. 1200 personas murieron por causa de la rebelión contra Moisés.
Un siervo o venado cuando brama es porque sus fuerzas se agotan. Los siervos se encuentran en las praderas y cuando corren desesperadamente es por agua. Corren porque sufren persecución, porque detrás de el van los perros y detrás de ellos los cazadores. El perro se guía por una huella ambiental y física. El venado corre por su vida y tiene sed de aguas que corren y no de charquitos. Porque cuando corre encuentra charcos de agua, pero el no quiere este tipo de agua sino las de un río. En tu vida crees poder encontrar ayuda en fuentes incorrectas, pero si encuentras la de Cristo Jesús será la fuente correcta. El hombre cree que busca a Dios creando religiones y en realidad es Dios quien busca al hombre, creando circunstancias porque el hombre en momentos de bondad se olvida de Dios, y sólo se acuerda de Él cuando siente opresión.
Cuando al siervo se le terminan las fuerzas, es porque ya no da más, cuando tu vanidad y orgullo son apaleados entonces Dios recién allí obra. Cuando el siervo encuentra agua de río, se sumerge y sus huellas son borradas porque el río corre; y se oculta detrás de arbustos para no ser divisado. También ya no hay huellas ambientales porque el viento las llevó, así los perros y el cazador quedan derrotados y se vuelven como tales. Jesucristo es el río, la fuente inagotable y tus huellas se pierden en Cristo Jesús y el enemigo no podrá hostigarte. El camino para buscarle a Dios, para asistir a la escuela de Dios son las lágrimas de día y de noche, así el salmista dice que las lágrimas fueron su pan de día y de noche.
vv 6-7 lo que está diciendo es que el río cuando hace cascadas trae piedras y van chocando en la orilla del río dejando cráteres y por ello el río suena. El salmista esta diciendo que ha sido masacrado, golpeado por las piedras dejando angustia. El salmista no quiere quedarse de brazos cruzados sino que comienza a buscar una repuesta elevando una oración de clamor, de gemir, es decir cuando ya no salen palabras. Y como Dios escucha la oración y no es indiferente al que Le busca de corazón, te abre las puertas. Hemos ido tras psicólogos, psiquíatras, brujos, en lugar de buscar a Dios en oración para vivir una vida justa. La misericordia llega al hombre que no retrocede sino que busca la Gracia de Dios. Dios nos meterá en Su proceso para esperar y confiar en un Dios vivo, santo, que todo lo puede. La abundancia de Dios, Su misericordia hizo que las cosas tuvieran sentido para el salmista angustiado. Dios se acuerda de Sus hijos que Le buscan en espíritu y verdad. Dios escucha la oración de clamor, de llanto, de humillación. Dios te bendijo en abundancia. Dios está de tu lado porque Su Santo Espíritu estará contigo, con paz pero ya no te desesperarás porque en Él esperarás.

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