domingo, 17 de junio de 2007

Viviendo una vida en plenitud

17/06/07
Predicador: Edinson Pinedo

Génesis 50:22-25
Tenemos que vivir una vida en plenitud para que otros nos quieran imitar.
Hay una promesa de Dios que vendrá a buscarnos (Juan 14:2-3)
En este tiempo que vivimos tenemos que estar dispuestos a caminar abiertos para que el Señor nos cambie, pidiendo al Señor que cambie nuestra capacidad para hacer cosas buenas.
Somos el resultado de lo que pensamos de nosotros mismos. Puedo decir que Dios ha trazado un plan para mi, y es bueno. Y tienes que caminar como tal. Tal como te dijo el Señor de cómo será el camino Tenemos que ser fieles a Dios.
Tenemos un niño, un adulto y un padre dentro de nosotros.
Hoy vemos como las circunstancias han matado al niño, el gozo, la paz, la alegría, el canto. El niño no tiene problemas y tiene libertad. En los momentos difíciles hay que tener paz, paciencia, alegría para afrontar las circunstancias.
No permitas que nadie toque tú cuota de fe. Dios te devuelve el niño para que sonrías y tengas gozo.
Lamentaciones 2:11 - Lamentaciones 2:21
A veces siendo creyentes, desfallecemos. Cuando Jesús nació y Herodes quiso matar al niño, pero el niño estaba en los planes de Dios. Mateo 2:13
También tenemos un adulto. Las espinas de la vida mataron el avance, la responsabilidad. Tenemos que activar el plan que ha trazado el Señor en nuestras vidas “id y predicad el evangelio de Cristo”.
Cuando tú sabes quién eres, no te vas a enojar en medio de la circunstancia porque estás en un plan, el plan de Dios.
Cuando se te burlen es porque el enemigo quiere que desistas del plan de Dios. Así como Josué, él no reaccionó porque él sabía quién era. . Es tiempo no sólo de escuchar, sino de actuar. Tengo que hablar del Señor, de mi fe para que la gente se salve.
Dios nunca va a depositar en las manos de un niño economía o bienes para que los administre, porque no se podrá desempeñar bien. El adulto es la parte de la responsabilidad.
Preguntemos: “Señor este ofrecimiento de trabajo nuevo ¿está dentro de tus propósitos?”
Tenemos que sacar la piedra de la inmadurez de nuestro corazón para madurar, para que nuestro corazón sea tierra fértil; para que Dios haga germinar la semilla, el potencial que tenemos (1 Timoteo 2:8)
¿Cómo es un hombre maduro? No tiene ira, levanta las manos, es decir avanza, conquista, ora en todo tiempo.
También tenemos un padre dentro de nosotros mismos. Algunos hemos perdido el carácter de padre.
Génesis 50:15-17
Cuando tú conciencia está limpia no hay temor. Dios va a permitir que sucedan pruebas para que te prepares a administrar las bendiciones de Dios.
Génesis 50:18 Lo que Dios ha dicho se va a cumplir; comienza a valerte por ti mismo, a no ser dependiente.
Génesis 50:19 Lo que nos dice este pasaje es que el hombre no es Dios para juzgar a los demás, por ello Josué no tiene resentimiento hacia sus hermanos.
Génesis 50:20 Todas las cosas ayudan a bien cuando tenemos la capacidad de padres. El que es padre: protege, tiene hijos, se preocupa cómo están, pregunta: ¿has comido?
1 Corintios 11:23-30

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