domingo, 25 de octubre de 2009

Confiesa quién es Jesús en tu vida (I Parte)

25/10/09
Predicador: Edinson Pinedo

Mateo 16:13-20
En este capítulo, Dios nos habla y nos muestra expresiones, las bendiciones y además nos dice que hay esperanza en Cristo.
El hombre está buscando algo en la vida y es así que Cristo nos encontró antes que nosotros.
Jesús estaba con sus discípulos en la región de Cesarea de Filipo, es decir fuera de Jerusalén.
El hombre ha monopolizado el evangelio, metiéndolo en templos. Pero no es para que sea monopolizado en templos, sino para que le llevemos a las plazas, al trabajo, al ámbito en el que te desarrollas. Tenemos que adorar en espíritu y verdad; y cuando sucede disfrutamos el fruto de nuestro trabajo. Y la gracia de Dios se extiende y se rompen los monopolios. Porque lo que atas en la tierra, será atado en los cielos.
Entonces Jesús saca a los discípulos de su lugar, de su hábitat y los lleva a Cesarea de Filipo para que vean la realidad fuera de la puerta de la ciudad. El asunto del evangelio es afuera de Jerusalén, es decir del lugar donde tú te desarrollas. Jesús los lleva a la puerta de Jerusalén para que vean que había homosexualidad y adoración a la diosa Diana a través del sexo. Y Jesús pregunta: “¿Quién dice los hombres que es el Hijo del Hombre?” La palabra “Hijo del Hombre” se refiere al Mesías prometido que ahora está presente.
Daniel 7:13-14; Mateo 8:28-34
Aquí, en estos pasajes, Jesús libera a endemoniados, sana a enfermos y en esas circunstancias estaban los fariseos. A Jesús lo que le interesaba era la opinión de la gente y no de los escribas.
“Hijo del Hombre” significa Cristo encarnado. Para que el hombre sea salvo; tuvo que morir un hombre. Era necesario que Dios se encarnara en hombre para morir por la humanidad, para justificar, quitar pecado, y para hacernos libres de nuestros pecados; porque Dios estaba lleno de ira contra el hombre, a causa de que había pecado.
Gálatas 4:4
Pablo llama a Jesús “nacido de mujer”, es la misa expresión en Job 14:1 Lo que está diciendo acá es que Dios vino como hombre. Hebreos 5:7
Jesús fue humano porque tuvo sed y miedo, pero no pecó. Él no quiso morir pero no se hacía su voluntad sino la del Padre. Por ello nosotros debemos cumplir el propósito por el que estamos en la tierra, porque no estamos para ocupar un espacio, sino para producir y generar cambios en la vida de la gente.
Por ello Jesús investiga el sentimiento del pueblo acerca de él, sin interesarle la opinión de los escribas.
Juan 7:41-42
vv 48-49 Muestra el desprecio de los fariseos hacia el común de la gente porque ellos sabían la ley al pie de la letra. Vemos que la gente estaba dividida con su opinión, porque aún Jesús no se había presentado como el Mesías. A Jesús le interesaba el testimonio de lo que él hacia. A ti te van a conocer por lo que eres y no por lo que dices.
Cristo restaura lo que se había perdido para ponerlo en lugares públicos (Mateo 5:14) para que alumbre a todos. Somos la luz de este mundo.
Mateo 16:13-14
La gente pensaba que Jesús era Juan el Bautista o un profeta.
Mateo 14:1-2
Herodes también pensaba que Jesús era Juan el Bautista.
Isaías 61:1-2
Otros decían que Jesús era el profeta Jeremías, porque tenía dirección de Dios. Por ello Jesús investiga para saber la opinión de la gente, entonces él pregunta: “¿Y vosotros quién decís que yo soy?” ¿Cuaĺ será tú repuesta si no conocieras a Jesús? gauchito gil, la difunta correa.
Mateo 16:15-16
Los discípulos estaban siendo instruidos para ser aptos para instruir a otros.
2 Timoteo 2:1-2
Es la misma expresión de Pedro.
Jesús quería que se multipĺicarán y consolidarán, dando fundamento. Cuando tú aprendes a ser consolidado, no te será difícil consolidar a otros. Jesús quería que ellos mismos tuvieran un conocimiento fundamental de Cristo. Por ello es importante el arrepentimiento, que significa un cambio de mente.
Mientras Cristo no haga una obra en ti, tú seguirás igual porque no hay conocimiento de Dios.
Salmo 127:1
Pregúntate a menudo: ¿Quién digo yo que es Jesús?
Tú no puedes saber quién es Jesús sino habita el consuelo contigo (el Espíritu Santo), si no está en tu ser, en tu vida y no lo conoces.
En una discusión cuando hay argumentos no habrá problemas porque hay ideas. Cuando se acaban los argumentos se utilizan las fuerzas, por ello hay guerras. El perdedor siempre utiliza las fuerzas. Pero en Cristo Jesús siempre hay esperanza porque los argumentos se renuevan todos los días, porque hay esperanza.
Se alegró Jesús con la repuesta de Pedro. El Señor le dice a Pedro: “Bienaventurado porque no te lo reveló sangre ni carne, sino el Padre.” (Mateo 16:17)
Al que tiene al hijo, tiene revelación y dirección de Dios. Cuando tú caminas por revelación, no te vas a equivocar.
Tienes que orar y preguntar: “¿Señor estás de acuerdo que yo me case, que me ponga de novio en este tiempo, que emprenda tal empresa, que vaya a tal lugar?”
Aprende a tener revelación y dirección en todo lo que tienes que hacer para ser conducido por el buen camino.
La repuesta de Pedro alegró el corazón de Jesús porque hablo del Padre y del hijo. Jesús le dice a Pedro: “Te falta algo hijo de Jonás.” Jonás representa al Espíritu Santo. El Espíritu Santo tiene que obrar en tu vida y es quién te dará dirección.
Juan 15:26
Sobre la palabra dicha tú estas haciendo una plataforma para caminar. “Y yo edifico en ti”, dijo Jesús a Pedro. El nombre Pedro significa pedazo de piedra.
Salmo 1:1
Si tú andas en cosas buenas serás bienaventurado porque accionas, porque no estás quieto, no esperas a que te golpeen la puerta.
Si tú reconoces que Jesús es el Mesías, tú tienes que demostrar con las acciones y tienes que caminar.
Mateo 5:1-11
Bienaventurado es la misma expresión del Salmo 1:1 marchando, accionando, andando.
Por eso dice bienaventurado son los mansos, los caballos de la caballería romana que están marcando el paso.
Por eso Pablo le dice a Timoteo: “esfuérzate en la gracia”. Bienaventurado es marchando.
Si tú eres pobre y Cristo vive en tu corazón y además estás marchando con Cristo, vas a dejar de ser pobre.
Nadie ha podido refutar las palabras de Jesús. Se diligente con lo que Dios ha puesto en tus manos. Administra tu tiempo, administra tu economía, y todo lo que ha puesto Dios en tus manos.
Bienaventurado los que lloran porque habrá consuelo para que sigas marchando. Cuando tú pasas por pruebas es para que tú sepas en dónde estás parado y para que te conozcas a ti mismo.

lunes, 19 de octubre de 2009

La intercesión (de la oración con fe para conquistar la tierra prometida)


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18/10/09
Predicador: François Gambin



Dios es espíritu y quiere que Le adoremos porque es espíritu y verdad.
Para Dios hay dos reinos: el reino de las tinieblas y el reino de luz. Cristo dice que debemos nacer de nuevo para entrar a su reino. Para ello pide que te arrepientas de tus pecados para poder sacarte del reino de las tinieblas.
La salvación tiene dos pasos, sacarnos de las tinieblas y el siguiente paso es llevarte a la luz, al Reino de los Cielos.
Dios nunca va a imponer, sino que te va a invitar a que te bautices para pasar al reino de la luz, porque el bautismo es un acto de obediencia.
La constitución del reino de las tienieblas dice que cada uno de nosotros podemos hacer lo que querramos.
La constitución del Reino de los Cielos es hacer la voluntad de Dios para ser parte del reino de sacerdotes. Para participar del Reino de los Cielos es importante la oración para poder actuar con “el querer” y “el hacer” la buena voluntad para hacer el bien. Y esto sucede porque somos capacitados por el Espíritu Santo, para hacer lo agradable y perfecto delante de Dios.
El papel de la oración es revelador de grandes cosas, para abrir los ojos espirituales, es decir las cosas que no se ven en el mundo natural, sino por medio de la palabra de Dios, porque son eternas. Por ejemplo: Dios nos llama para anunciar las virtudes de aquél. La promesa de la presencia de Dios se producirá cuando tomemos el papel de la gran comisión, al discipular naciones.
Dios ha dado la unción del Espíritu Santo para transformar esta Nación para cambiar un malo en bueno, para sanar, para libertar.
La palabra de Dios es vida y espíritu. Sin el Espíritu Santo no podremos entender Su palabra para poder agrandar la visión de lo que puede ver el hombre (en el mundo natural), porque Dios lo ha hecho a Su imagen.
Dios no contesta la oración con duda, sino la oración con fe. Hay que obedecer para que Dios nos dé una repuesta, ya que Él no hace favoritismo.
La fe viene por el oir la palabra de Dios, para que la oración sea poderosa, y porque Dios escucha la oración del justo. Abraham no sólo escucho la palabra de Dios, sino que la obedeció porque Le creyó y fue capacitado por el Espíritu Santo para creer y obedecer a Dios. Dios nos ha dado el potencial para ser sal y luz. Sal para hechar la corrupción, y luz para hechar las tinieblas.
Dios ha escuchado el gemir de Su pueblo que estaba en esclavitud y Moisés construyó el tabernáculo para hablar con Dios.
La Biblia dice que la realidad está en Cristo y que en Su palabra entenderemos cuál es la voluntad de Dios, que es ir a conquistar la tierra prometida.
Esta conquista sólo se puede hacer en la oración, ya que no es una lucha cuerpo a cuerpo. Ahora sabemos que la lucha no es contra carne y no se vence con buenas intenciones, sino con la oración para derribar fortalezas.
A cada uno de Sus hijos, Dios los está transformando en soldados espirituales para manejar las armas poderosas y anunciar las virtudes de aquel.
No somos personas insignificantes, somos el pueblo de Dios. Ahora vamos a escuchar lo que dice Cristo a su Iglesia en relación a la oración.
Vamos a fortalecer la fe por el oir Su palabra. Por la fe se han ganado guerras, se han conquistado reinos y se han sanado reinos.
Marcos 11:22
Somos personas de fe y debemos proclamar la fe, es decir hablarla y creerla en nuestros corazones. La fe es la certeza de lo que se espera pero que no se ve. Una oración con fe es la oración quel Dios responde.
Hebreos 11:3
Con nuestra fe sólo debemos recibir porque Dios ya te lo ha dado todo. La fe es un brazo espiritual que va al cielo y toma lo que necesito.
Dios sólo se mueve por fe, no por necesidad. La fe es el dinero en el mundo espiritual porque Cristo lo pago todo por mi. La fe viene por el oír la palabra de Dios, no por conocimiento. Conocer la palabra de Dios no es suficiente. Necesito alimentar mi alma cada día con comida espiritual, de igual manera cuando alimento mi cuerpo.
Veamos en quién hemos creído, en Cristo. Jesús dice que debemos creer en él. Pero puedes decir que debemos creer en Dios. Parece una confusión, pero no lo es porque Dios y Cristo, uno es.
Jesús cuando hablaba a los escribas, lo hace a la misma altura del legislador, es decir de su padre: "Antes de Abram yo soy."
Él mismo enseña la humildad y dice que aprendamos de él que es manso y humilde. "Yo soy el pan y quién coma de mi palabra, no tendrá más hambre. Yo soy la luz del mundo, el que me siga no estará más en oscuridad. Yo soy el mediador con el Padre, ninguno viene al Padre si no es por mi."
Conocemos a Dios por medio del Espíritu Santo. Dios hizo un pacto con nosotros, Sus hijos. En el bautismo cada uno de nosotros hacemos un pacto con Dios, al aceptarlo como nuestro único salvador.
Cuando Jesús habla es una palabra que alimenta tu fe.
"¿Quién soy?" Es la gran pregunta que hace Jesús y a la que Pedro contesta: "Tu eres el Cristo, el Mesías." Y sucedió porque no se lo reveló la carne sino el espíritu.
Cristo es el Mesías, es decir Dios hecho carne.
El que no obedece, es decir no cree, no tiene la vida eterna. Obedecer a Dios es el primer deber y el primer pecado es no creer en Dios.
Juan 8:24
Sin fe es imposible agradar a Dios.
Cada día debemos tener una dieta espiritul de escuchar Su palabra.
Lo que mueve a Dios es nuestra fe en Sus promesas. Dios ha creado todo por Su palabra. Debemos mirar las cosas de arriba, no después de tu muerte terrenal. Con el bautismo hemos sido resucitados conjuntamente con Jesús, y sentados conjuntamente con él a la derecha del Padre Celestial. Y es por gracia y por fe, por una postura en autoridad. Dí: "Señor aumenta mi fe."
Cristo compara tu fe con un grano de mostaza, y si la confesamos entonces Dios cumplirá Sus promesas. Las cosas que no vemos (del mundo espiritual) son las eternas.
Lucas 13:18-19
La fe es vivir la palabra de Dios, y si permanece en nosotros, nos hará libres porque la palabra está en nuestros corazones.
La palabra de Dios es poder y confesarla eso también es fe. Pero cuando la fe se desgasta debo alimentarla con Su palabra.
Salmos 120:1-2 ; Salmos 103:2 ; Isaías 53:4 ; Juan 1:3-8 ; Hebreos 13:8
Jesús ha venido a destruir las obras del mal.
Cree y verás la gloria de Dios manifestarse en tu vida. La fe es un estilo de vida y si confiesas que Cristo es el Señor, y crees que es el Señor, entonces él es el Señor. La palabra de Dios es alimento que vivifica.
ORAR + CREER = PROCLAMAR PARA GENERAR LO QUE HAS PEDIDO
Esto es la fe.

domingo, 18 de octubre de 2009

La intercesión (de la oración con fe para conquistar la tierra prometida)

18/10/09
Predicador: François Gambin

Como Pastor, François está aquí en Argentina para levantar a un equipo de intercesores.
Dios es espíritu y quiere que Le adoremos porque es espíritu y verdad.
Para Dios hay dos reinos: el reino de las tinieblas y el Reino de luz. Cristo dice que debemos nacer de nuevo para entrar en su Reino. Para ello pide que te arrepientas de tus pecados para poder sacarte del reino de las tinieblas.
La salvación tiene dos pasos, sacarnos de las tinieblas y el siguiente paso es llevarte a la luz, al Reino de los Cielos.
Dios nunca va a imponer, sino que te va a invitar a que te bautices para pasar al Reino de la luz, porque el bautismo es un acto de obediencia.
La constitución del reino de las tinieblas dice que cada uno de nosotros podemos hacer lo que queramos.
La constitución del Reino de los Cielos es hacer la voluntad de Dios para ser parte del reino de sacerdotes.
Para participar del Reino de los Cielos es importante la oración para poder actuar con “el querer” y “el hacer” la buena voluntad para hacer el bien. Y esto sucede porque somos capacitados por el Espíritu Santo, para hacer lo agradable y perfecto delante de Dios.
El papel de la oración es revelador de grandes cosas, para abrir los ojos espirituales, es decir las cosas que no se ven en el mundo natural, sino por medio de la Palabra de Dios porque es eterna. Por ejemplo: Dios nos llama para anunciar las virtudes de aquél que nos salvo. La promesa de la presencia de Dios se producirá cuando tomemos el papel de la gran comisión de discipular las naciones.
Dios nos ha dado la unción del Espíritu Santo para transformar esta nación, para cambiar por medio de la Palabra a una persona mala en buena, para sanar y para libertar.
La Palabra de Dios es vida y espíritu. Sin el Espíritu Santo no podremos entender Su Palabra para poder agrandar la visión de lo que puede ver el hombre (en el mundo natural), porque Dios lo ha hecho a Su imagen, es decir un ser espiritual.
Dios no contesta la oración con duda, sino la oración con fe. Hay que obedecer para que Dios nos dé una repuesta, ya que Él no hace favoritismo.
La fe viene por el oír la Palabra de Dios, para que la oración sea poderosa, y porque Dios escucha la oración del justo. Abraham no sólo escuchó la Palabra de Dios, sino que la obedeció porque creyó y fue capacitado por el Espíritu Santo para creer y obedecer a Dios. Dios nos ha dado el potencial para ser sal y luz. Sal para echar la corrupción, y luz para echar las tinieblas. Dios ha escuchado el gemir de Su pueblo que estaba en esclavitud y Moisés construyó el tabernáculo para hablar con Dios.
La Biblia dice que la realidad está en Cristo y que en Su palabra entenderemos cuál es la voluntad de Dios, que es ir a conquistar la tierra prometida.
Esta conquista sólo se puede hacer en la oración, ya que no es una lucha cuerpo a cuerpo. Ahora sabemos que la lucha no es contra carne y no se vence con buenas intenciones, sino con la oración para derribar fortalezas.
A cada uno de Sus hijos, Dios los está transformando en soldados espirituales para que puedan manejar las armas espirituales que son poderosas y poder anunciar las virtudes de aquél. No somos personas insignificantes, somos el pueblo de Dios. Ahora vamos a escuchar lo que dice Cristo a su Iglesia en relación a la oración.
Vamos a fortalecer la fe por el oír Su palabra. Por la fe se han ganado guerras, se han conquistado reinos y se han sanado reinos.
Marcos 11:22-24
Somos personas de fe y debemos proclamar la fe, es decir hablarla y creerla en nuestros corazones. La fe es la certeza de lo que se espera pero que no se ve. Una oración con fe es la oración que Dios responde.
Hebreos 11:3
Con nuestra fe sólo debemos recibir porque Dios ya te lo ha dado todo. La fe es un brazo espiritual que va al cielo y toma lo que necesita. Dios sólo se mueve por fe, no por necesidad. La fe es el dinero en el mundo espiritual porque Cristo lo pago todo por mi. La fe viene por el oír la Palabra de Dios, no es por conocimiento. Conocer la Palabra de Dios no es suficiente. Necesito alimentar mi alma cada día con comida espiritual, de igual manera cuando alimento mi cuerpo.
Veamos en quién hemos creído, en Cristo. Jesús dice que debemos creer en él. Pero puedes decir que debemos creer en Dios. Parece una confusión, pero no lo es porque Dios y Cristo, uno es.
Jesús cuando hablaba a los escribas, lo hace a la misma altura del legislador, es decir de su Padre: "Antes de Abram yo soy."
Él mismo enseña la humildad y dice que aprendamos de él que es manso y humilde. "Yo soy el pan y quién coma de mi palabra, no tendrá más hambre. Yo soy la luz del mundo, el que me siga no estará más en oscuridad. Yo soy el mediador con el Padre, ninguno viene al Padre si no es por mi."
Conocemos a Dios por medio del Espíritu Santo. Dios hizo un pacto con nosotros, Sus hijos. En el bautismo cada uno de nosotros hacemos un pacto con Dios, al aceptarlo como nuestro único salvador.
Cuando Jesús habla es una palabra que alimenta tu fe.
"¿Quién soy?" Es la gran pregunta que hace Jesús y a la que Pedro contesta: "Tú eres el Cristo, el Mesías." Y sucedió porque no se lo reveló la carne sino el Espíritu.
Cristo es el Mesías, es decir Dios hecho carne.
El que no obedece, es decir no cree, no tiene la vida eterna. Obedecer a Dios es el primer deber, y el primer pecado es no creer en Dios.
Juan 8:24
Sin fe es imposible agradar a Dios. Cada día debemos tener una dieta espiritual de escuchar Su palabra. Lo que mueve a Dios es nuestra fe en Sus promesas. Dios ha creado todo por medio de Su palabra. Debemos mirar las cosas de arriba, no después de tu muerte terrenal. Con el bautismo somos resucitados conjuntamente con Jesús, y sentados conjuntamente con él a la derecha del Padre Celestial. Y es por gracia y por fe, por una postura en autoridad. Dí: "Señor aumenta mi fe."
Cristo compara tu fe con un grano de mostaza, y si la confesamos entonces Dios cumplirá Sus promesas. Las cosas que no vemos (del mundo espiritual) son las eternas.
Lucas 13:18-19
La fe es vivir la Palabra de Dios, y si permanece en nosotros, nos hará libres porque la Palabra está en nuestros corazones. La Palabra de Dios es poder y confesarla eso también es fe. Pero cuando la fe se desgasta debo alimentarla con Su palabra.
Salmo 120:1-2; Salmo 103:2; Isaías 53:4; Juan 1:3-8; Hebreos 13:8
Jesús ha venido a destruir las obras del mal.
Cree y verás la gloria de Dios manifestarse en tu vida. La fe es un estilo de vida y si confiesas que Cristo es el Señor, y crees que es el Señor, entonces él es el Señor. La palabra de Dios es alimento que vivifica.
ORAR + CREER = PROCLAMAR PARA GENERAR LO QUE HAS PEDIDO
Esto es la fe.

jueves, 15 de octubre de 2009

El Éxito a la manera de Dios

En esta presentación le dire mi amigo, mi amiga cuál es el éxito a la manera de Dios. Note que no escribí "El éxito a la manera del hombre," sino "El éxito a la manera de Dios."
La mejor prueba de que creemos en Dios, es que obedecemos Su palabra. Cuando obedecemos, Él se nos manifestará de una manera maravillosa y viviremos una vida en victoria.
El Libro de Josue es una gigantesca lección del verdadero significado del éxito, no de la perspectiva humana sino de la perspectiva divina.
Seguidamente se encuentra el enlace de la presentación:

lunes, 12 de octubre de 2009

Congreso Juvenil Termas 2009 - La cena con el Señor, el momento en el que reafirmas tu compromiso con Jesús

12/10/09
Predicador: Samuel Laborde

Si Dios me ha escogido, si o si tengo que ser la luz en la casa para que vean la Gloria de Dios en mi. Porque Jesús nos enseña que cuando encendemos una lámpara, no la debemos esconder bajo la cama, si no hay que ponerla en un candelabro para que ilumine.
Elías estaba en la cueva descansando, pensando negativamente, con temor, diciendo para que sirvo. Y allí en la cueva vino Dios con violencia y Elías salió de la cueva porque entendió que el Señor le iba hablar, y así lo entendió. Dios arma Su programa y mueve los recursos como Él quiere y toca el corazón de las personas como Él quiere.
Lo importante de este Congreso es decir que Dios me ha hablado.
Jesús cerró su ministerio con una Santa Cena y no fue con gozo porque Jesús le dijo: “mi alma está angustiada hasta la muerte”, porque no era el mejor momento como humano porque se sometió en todo, en todo fue tentado, afligido, probado y por último aceptar la muerte de malhechor.
Jesús murió en mi lugar y tomó mi culpa, mis maldades, mis inequidades. Aceptó la voluntad del Padre que era ese sacrificio para salvarnos a nosotros. No dijo: “soy inocente”, más bien agachó la cabeza y cerró su boca como un malhechor que fue descubierto. Derramó su sangre para remisión de pecados y murió en mi lugar y para que también fuera salvo.
La cena con el Señor es mi compromiso con él. No puedo vivir una fe sin compromiso, porque sino sería un religioso, sino debes ser un hombre o una mujer comprometido con el Señor para ser fiel hasta la muerte y no hasta que surja el primer problema.
Así como él me amó, también debemos seguirle por amor, no por lo que nos promete. Así como un matrimonio se une por amor, avanza y no por interés, porque sino fracasan. Jesús le dijo a quienes les seguían por los panes, que si no comían su carne no tendrían lugar en los Cielos. Si lo tienes a él, lo tienes todo porque eres coheredero conjuntamente con él.
Él quiere que lo sigamos por amor. Si una vida no prospera en Dios, entonces algo pasa. Seguirle produce una prosperidad del alma para con él, con un amor sincero y maduro con él. Para amarlo, conocerle y obedecerle.
El que entiende el llamamiento de Dios, descubrirá la perla de gran precio; porque dejarás todo porque allí está el tesoro.
Nos cuesta tanto renunciar a nuestros tesoros, por ejemplo la forma de razonar. Bastará escuchar Su palabra para dejar todo y seguir a Jesús porque entendemos que Jesús es de mucho valor, más que las cosas materiales.
Dios te ha llamado para que tú joven veas las cosas que Dios espera de ti.
Sabemos que hay una etapa de ilusión como joven, pero no hay mejor cosa que seguir a Jesús con todo tu corazón, quién guiará tu vida, serás bendecido y te dará la salida a tus problemas.
Mira a Cristo como ejemplo, modelo y sigue sus pasos, sus palabras y te aseguro que no vas a fracasar.
Cuando Dios creó a Adán lo hizo a Su semejanza: santo, puro, perfecto, limpio, honesto, que no conoció maldad, y por causa de la desobediencia entró el pecado generación por generación, perdiendo la imagen de Dios, haciendo maldades a tal punto que Dios dijo me arrepiento. Pero Dios se había provisto de un restaurador de Su imagen, que es Jesús, para que el plan de Dios se cumpla para ser imagen de Dios, restaurado por el Señor.
Dios, por medio de Cristo, ve al hombre restaurado, por su plan lo ve como una obra terminada. Este es el plan, una Iglesia sin manchas, pura, limpia porque esa es Su Iglesia.
Por eso la salvación no consiste en conceptos, sino que Jesús sea una realidad en nosotros, es decir revelada.
Pues entonces tendré la certeza de que soy salvo y podré decir de que soy salvo porque Jesús vive en mi. De no ser así, Jesús sólo será una postura en mi mente. A esto debemos llegar, esta es la meta por sobre todas las metas, de que Jesús viva en mi y en cada uno de nosotros.
La salvación no es por obra sino por gracia de Dios. Sin embargo los frutos del espíritu son el resultado de que Cristo vive en mí.
Si el Señor condenó mi pecado y declaró que él vive en mi; ya no debo vivir para pecar sino para agradar a Dios y hacer Su voluntad.
El que tienta no es Dios, sino el enemigo. No porque lo hacen los otros, tenemos que tener la certeza de que él vive en mí.
Cuidado con el pecado de fornicación y adulterio, porque estos no entrarán en el Reino de Dios.

domingo, 11 de octubre de 2009

Congreso Juvenil Termas 2009 - Acercaos a Dios y Él se acercará a vosotros

11/10/09
Predicador: Gabriel Laborde

Joel 3:10
Cuando una persona no come, se hace débil. Pero en el espíritu es lo contrario porque consuelo mi carne que es débil. Ese es el momento que debo sacar fuerzas del espíritu. Es allí cuando el espíritu se activa. Dios dice que no te quejes si no llegas.
Este pasaje de la Biblia tiene que ser luz en momento de una nueva prueba para activar el espíritu. Es verdad que mi cuerpo está conforme, pero cuando consuelo mi carne me paro firme y digo: maligno te ordeno que retrocedas. Aquí se activa la fe y le demuestras al enemigo que es el tiempo para ser luz. Cuando no fortaleces al espíritu no permites como hijo que tu papá te hable a calzón quitado, por temor a Dios.
Instrúyete, prepárate, aprendamos a ser temerosos para ayudar, y dar resplandor al joven para decir “fuerte soy”. Pero para que puedas decir “fuerte soy” tiene que haber un encuentro con Jesús.
Mateo 28:5
La sorpresa para Elías fue que la piedra había sido removida y que Jesús no estaba en la tumba. Nosotros venimos a la Iglesia con una necesidad. Cuando uno viene en busca de Dios se nota en la cara. Así se ve en la cara del joven cuando no viene a buscar a Jesús, ya que es un problema y son más problemas para los pastores.
La juventud es la fuerza del presente de la Iglesia para que vean el objetivo, y para que suceda te tienes que encontrar con él.
Mateo 28:6-8
Muchas veces cuando vamos a la presencia de Dios y no encontramos lo que queremos, nos enojamos. Pero en este pasaje dice que estas mujeres se les apareció el ángel de Jehová y les dio una directiva. Hoy el ángel representa el Pastor y le dice al joven: Jesús ha resucitado de entre los muertos. Cristo viene y quiere encontrarse con ellas. Con la directiva ya dada, las mujeres llevan el mensaje a los discípulos con mucho temor. Pero dice la palabra de Dios que cuando obedecieron al ángel, se les apareció Jesús y no como ellas querían: acostado y muerto.
Cuando vuelvas a tu lugar de origen, en alguna parte se te aparecerá el maestro. Habla de que viniste muerto pero Jesús se te revelará si te esfuerzas.
Marcos 16:10-11
Descubrimos en este cuadro al espíritu de hoy, que está de moda: la depresión.
¿Saben por qué no creyeron los discípulos a las mujeres? Por desobediencia. Les vas a decir a los jóvenes que el maestro vive y que la puerta de la gracia está abierta, pero en el camino vas a necesitar el toque del maestro para estar protegido y para que el espíritu de depresión no te destruya. Porque por causa de no encontrarse con Jesús, los discípulos fueron absorbidos por el espíritu de depresión. Este es el momento para decir al espíritu: “fuerte soy”; y digas: “llevaré el mensaje porque tú me has dado la orden para predicar, para transformar y revolucionar una sociedad.”
Es necesario que prediques con gozo y temor. Pero sus hermanos no le creyeron, pero cumplió al dar el mensaje. Tú no puedes insistir con el mensaje sino ser obediente.
Cuando vos estás en el Espíritu, por causa de un encuentro con Dios, el mensaje va al espíritu de tu hermano, sin importar lo que te digan porque predicas al espíritu. La obra es de Dios y tú tienes que lanzar sólo la semilla.
Hoy el ángel te usa hablando de Jesús y diles a tus hermanos que Cristo vive. Las mujeres no fueron llevando el mensaje murmurando, ni quejándose, sino con gozo y en medio del camino apareció el Mesías, el encuentro deseado.
Joven prepárate para lo que viene, a pesar de que hoy no sientas nada, porque no es a tu manera que las cosas sucederán, sino será a la manera de Dios que las cosas sucedan; y en el camino se revelará la dimensión.
Avivamiento significa despertar el espíritu. Si sigues manejándote de la misma manera, no verás a un Cristo vivo. Pero cuando actúas por obediencia y cuando ves al Pastor como un ángel, lo respetas como un enviado de Dios y verás la dimensión de Dios. De no ser así seguirás enojándote.
La Biblia habla de desviación, de una enfermedad. Si Cristo murió por mi, tengo que servir al Señor con una conciencia limpia y con una fe no fingida. ¿Y quién puede llegar a esto? Todos porque Su gracia es mayor que nuestros errores y para que no reincidas.
Dios quiere darte una completa victoria plena sobre el pecado y la maldad en tu mente, en primer lugar. ¿Cómo vas a vivir y andar de aquí en adelante? Que el Señor nos dé Su gracia y nos ayude. Hoy el mundo habla de derechos pero nadie habla de obligaciones. Este mundo es un desafío a tu fe, y ya no hay que volver atrás porque tenemos la victoria. El primer desafío es vivir de acuerdo a Dios, y no de consejos de no sabios, sino vivir santamente y servir a Dios.
La Santa Cena me lleva a recordar lo que hizo Jesús por mi y también para reafirmar mi compromiso para con él.
Hebreos 10:12-25
vv 20-22 Hace mención al tabernáculo móvil, un templo portátil, en donde la gente buscaba la gracia de Dios por medio de ofrendas. En el tabernáculo había un lugar con dos habitaciones: el lugar santo para derramar perfume, y más atrás del velo, estaba el lugar santísimo con una arca formada de oro. También se encontraba el maná y la vara de Aarón y las tablas de Dios. También estaba el propiciatorio custodiado por querubines. El sumo sacerdote podía entrar una vez al año al lugar santísimo cubierto, de sangre caliente, vertido con sangre de un sacrificio. El sacerdote tenía campanillas en sus vestiduras. Si no sonaba, significaba que había muerto. Pero el nuevo pacto es que Jesús, como sumo sacerdote, con el derramamiento de su sangre fue aceptado por Dios (vv 19). El lugar santísimo es la misma presencia de Dos. Cuando Jesús dijo consumado es, el velo que separaba del lugar santo del santísimo, se rompió para abrir el camino hacia Dios. Esta es la gracia, esto es el nuevo pacto (vv 21). Por medio del nuevo pacto no hay ningún impedimento para acercarme a Dios, sino que puedo entrar en Su presencia.
El Espíritu Santo tiene control de nuestra mente y la palabra de Dios es para que nos limpie. La sinceridad nos llevará siempre a la victoria (vv 23). No serás fluctuante en el camino, ni en la palabra de Dios porque fiel es Jesús por toda tu vida.
vv24 Debemos estimularnos a amarnos y hacer obras para Dios.
vv25 Tienes comunión con tu hermano, por lo tanto expresa tu amor a tu hermano, porque en el cuerpo de Cristo es dónde se manifiesta Su presencia. La Santa Cena es un momento especial para sentir que nos necesitamos y que nos amamos. Debe ser un momento de gratitud y para bendecir al Señor porque la Santa Cena es un privilegio por Su gracia, porque así Le ha placido.
Si Jesús es tu primer amor, Dios se encargará del resto.


Ver jóvenes con corazones quebrantados, con lágrimas en sus ojos clamando por los familiares y personas que no son familiares, fue un momento conmovedor.
La Santa Cena permitió reconocernos a cada uno de nosotros de lo que hay de Dios en nuestras vidas.”

Joel 3:10 (Reina-Valera 1960)
10 Forjad espadas de vuestros azadones, lanzas de vuestras hoces; diga el débil: Fuerte soy.

Vocabulario

Azadón: Instrumento que se distingue de la azada en que la pala, cuadrangular, es algo curva y más larga que ancha. Sirve para rozar y romper tierras duras, cortar raíces delgadas y otros usos análogos.
Hoz: Instrumento que sirve para segar mieses y hierbas, compuesto de una hoja acerada, curva, con dientes muy agudos y cortantes o con filo por la parte cóncava, afianzada en un mango de madera.

domingo, 4 de octubre de 2009

Dios te está llamando para ser como Sifra y Fúa, con un espíritu salvador de vidas

04/10/09
Predicador: Edinson Pinedo

Éxodo 1:7-21
A la muerte de José y Faraón, el nuevo Faraón no conocía la obra de José y se ensaño con el pueblo de Dios.
Este es un mes nuevo y hermoso para la Iglesia de hoy porque Dios nos está llamando a ser como Sifra y Fúa. A tener un espíritu para salvar vidas porque estamos corriendo tiempos escatológicos.
Nosotros estamos cómodos porque nos hemos acostumbrados a vivir con malas noticias; por ello la Biblia dice que el amor de muchos se enfriará, y se perderá la pasión por ganar vidas (Mateo 24:12). La vida es Dios en nosotros haciendo que se cumpla Su plan, porque Dios me hizo nacer y porque estoy viviendo en el presente año.
Tengo que saber que no soy una persona que vive de casualidad. La Biblia no dice que viene a buscar pecadores, sino lo que se había perdido: “la identidad del hombre con Dios. La comunicación con Dios.” A esto Dios lo llama perlas preciosas, porque tú eres un escogido por Dios. Cuando tienes una joya la colocas en un lugar que todo el mundo la pueda ver porque es de alto precio. Jesucristo murió por la humanidad entera, y se intereso en hombres y mujeres fornicarias, en adúlteros, en aquellos que la sociedad dice que no sirven para nada. Y lo hizo porque eres de alto valor y porque si le crees, la gracia vendrá sobre ti y serás un potencial en las manos de Dios. Su venida está cerca (Mateo 24 y 25). Todo está cumplido. La Biblia profetiza que habrá pestes, enfermedades incurables y que los días serán como Sodoma y Gomorra; y es porque Cristo viene a llevar su Iglesia. No tenemos que estar dormidos, sino velando como las cinco vírgenes sensatas, buscando a Dios y no como las insensatas. Y ello es porque el trigo y la cizaña crecen juntos.
Dios no te creo para que llores. Tú puedes llorar en Su presencia, pero Dios te creo para que te multipliques para que vivas alegremente. Y todo lo que hacemos tiene que dar fruto, y tienen que ser vidas ganadas para Cristo.
Tú y yo hemos sido llamados para cumplir la misión de salvar vidas, así como Sifra y Fúa. Dios nunca te va a dejar en medio de faraones, sino en medio de Su presencia para conquistar Naciones.
vv 15 (Éxodo 1:15) Faraón le ordena a las parteras a matar los niños hebreos varones, pero Sifra y Fúa escondían a los niños porque temían a Dios. Y en esas circunstancias nace un niño de nombre Moisés.
Éxodo 2:1-10
Cuando tú ganes una persona para Cristo, no ganas un drogadicto, un homosexual, un alcohólico, sino que ganas un hombre o una mujer que cambiará el sistema.
Predica por pasión y compasión, no por lástima porque Cristo derramó su pasión y compasión, para que tú no vayas al infierno. Ese hombre o mujer será un día el o la que va a tener que solventar misioneros para todo el mundo. Dios guardó la vida de Moisés y cuando tú trabajas, no lo haces de más. Cuando el pueblo comienza a crecer hay bendición, hay economía. Dios prospera tu familia cuando haces la voluntad de Dios (Éxodo 1:21). Dios siempre recompensa a Sus hijos. No te tienes que avergonzar de tu apellido y de tu nación porque eres del Reino de los Cielos. Nosotros, como hijos de Dios, tenemos identidad, somos Reyes y Sacerdotes.
¿Cuándo vas a ver un pueblo fuerte y fructífero? (vv 19-21) Cuando veas a parteras salvando niños. ¿Quiénes son las parteras? Tú eres una partera, un partero. Esto empezará cuando tú hables del evangelio de Cristo. Esto debe ser tu anhelo cada día. Toda persona que ganes para Cristo tienes que verlo como hijo de Cristo, no como un mendigo. Cuando tienes un reino rico nunca habrá pobres, pero no solamente pobres en economía, sino en todas las áreas: en salud, en paz, en amigos. Cuantos más amigos tengas, más posibilidades tendrás de avanzar y serás un hombre o una mujer bendita.
Tú no trabajas para los extraños, sino para Cristo y los hijos de Dios. Dios te llamó para formar una generación bendita, para salvar niños de las manos de Faraón. Tú y yo somos los responsables de salvar niños para el Reino de Dios, para rescatarlos de las manos de faraones. Moisés fue un libertador de familias, tú puedes salvar a un Moisés, a un libertador. Dios se encarga de tu familia, cuando tú Le buscas en oración, cuando tú te comprometes con Dios Él se compromete contigo. Porque Dios honra a los que Le honran.
¿Quieres ser bendecido por Dios? Determínate con Dios. ¿Cuál es tu prioridad?
Este es tiempo de evangelización. Estamos alineados a los propósitos de Dios. La mentalidad de Cristo es tener a la ciudad a los pies de Cristo. Tenemos que abrirnos a la mente de Cristo. Esto va a funcionar con gente que abra sus casas para que entre la presencia de Dios y para que provoque cambios. Cuando tú ganas una persona se están rompiendo maldiciones ancestrales: suicidios, angustias porque la sangre de Cristo cura. Dios quiere un pueblo sano y bendito. Confiesa Su palabra y verás como cambias porque tú no eres cola, sino cabeza, no estarás abajo, sino arriba.
Arrepentimiento es un cambio de mente, un cambio de dirección porque tú naciste para triunfar y no te olvides que tú tienes una responsabilidad de multiplicarte, porque los genes de Dios están en ti. Estamos en tiempos de apertura a Dios y esa apertura es ilimitada para Su pueblo. Según como le creas a Dios, será tu crecimiento. Según como le amas a Dios, será tu prosperidad.
2 Crónicas 19:1-11; 20:1-21
Josafat, rey de Judá, recibió el ataque de los amonitas cuando estaba haciendo el bien, quitando las imágenes y disponiendo su corazón para buscar a Dios. El ataque de los amonitas fue permitido porque Dios estaba probando a Josafat.
¿Para qué Dios nos prueba? Dios conoce y sabe cómo somos nosotros, cuánto no le amamos. Nos prueba para que nos demos cuenta de cuanto le amamos, cuanto Le buscamos y si confiamos o no en Dios.
¿En qué circunstancias Dios debería probarte para saber cómo tú estás?
Cuando el pueblo está por ser atacado, Josafat reafirma lo que Dios Le había dicho y te ha dicho a ti: que serás grande, prosperado, bendito. Josafat reafirmo lo que recibió del Señor. Él se postró (vv 18-20) ante Dios y le adoró en medio de la prueba. Alabanza es expresar lo que Dios ha hecho en tu vida: te salvo, te libro de la mentira, así Dios te librará en medio de las circunstancias porque es una promesa de Dios (vv 21).
En tiempos de angustia tienes que cantar, adorar a Dios y recurrir a Sus promesas y decir que Cristo te salvó para cumplir un propósito en la tierra: crecer, desarrollar una vida de reino. Tenemos que levantar la alabanza, bendiciendo el nombre de Dios porque Su corazón se enternece, y es distinto que la bendición por misericordia, en donde Dios te bendice porque ya no tiene más remedio.
¿Cuántos están determinados en predicar en tiempo y fuera de tiempo para que las vidas no sean condenadas por Faraón? No le des lugar a tu carne (pasiones), a tu alma (sentimientos) sino a la espada de Dios para estar íntegros en el día malo. No tienes autoridad si dices y no haces lo que dices. Este es tiempo de compromiso, de tener intimidad con Dios. Ora por las mañanas buscando al Señor y verás que tocarás Su corazón y las cosas sucederán como Dios quiere. Es tiempo de siega, es tiempo de predicación.

Vocabulario

Cizaña: (Del lat. zizanĭa). 1. f. Planta anual de la familia de las Gramíneas, cuyas cañas crecen hasta más de 1m, con hojas estrechas de 20cm de largo, y flores en espigas terminales comprimidas, con aristas agudas. Se cría espontáneamente en los sembrados y la harina de su semilla es venenosa. 2. f. Vicio que se mezcla entre las buenas acciones o costumbres. 3. f. Cosa que hace daño a otra, maleándola o echándola a perder.
Escatológico: adj. Perteneciente o relativa a las postrimerías de ultratumba. (Últimos años de la vida)
Postrimería: 1. f. Último período o últimos años de la vida. 2. f. Período último de la duración de algo.
Ultratumba: adv. Más allá de la muerte.